EL JUDÍO INTERNACIONAL ALBERT BOURLA SE APROPIÓ DE LA VACUNA ALEMANA
EL PUEBLO ALEMÁN INVIRTIÓ 350 MILLONES DE EUROS DE DINERO PÚBLICO EN LA INVESTIGACIÓN VACUNAL DE BIONTECH. Según «La Vanguardia», «Nacionalizar Pfizer» (Luís Amiguet), 1-12-2021, p. 3, Albert Bourla compró la patente de BioNTech y Pfizer se ha enriquecido con 80.000 millones de dólares. Por si fuera poco, Bourla dio prioridad a Israel en la comercialización del producto. Así, los alemanes tuvieron que ponerse a la cola y, como manda la Biblia, esperar a pagar por su propia vacuna a que el «pueblo escogido» se hubiese ya salvado.
LA VACUNA ALEMANA TERMINA EN ISRAEL
JUDIADA
Según Definciones de Oxford Languages, judiada es un sustantivo femenino despectivo que significa: «acto injusto o malintencionado hecho para molestar o herir a alguien» (RAE: «mala pasada o acción que perjudica a alguien» y «multitud o conjunto de judíos»). Evidentemente, no sólo los judíos perpetran judiadas y no todos los judíos las perpetran, pero la cuestión no estriba en contabilizar cuántos de unos y de otros, cálculo imposible, sino en determinar si hay en el judaísmo como ideología conceptos y normas que favorezcan la perpetración de judiadas hasta el punto de justificar el calificativo. Sin embargo, se ha llegado a tal extremo de manipulación en este espinoso asunto que los medios de comunicación nos quieren convencer de que los hijos de la luz nunca perpetran judiadas y que este tipo de adjetivos —sin duda, por otra parte, de procedencia cristiana antisemita—, son completamente arbitrarios. Explicamos así en CARRER LA MARCA lo que «La Vanguardia» no explica ni explicará nunca, o a lo sumo explicará sólo a medias, precisamente por ese pudor —¿autocensura?— que conduce a omitir ciertas informaciones incómodas.
BOURLA
Mientras Israel les negaba la vacuna a los palestinos —judiada—, el judío Burla priorizó a Israel en la comercialización del medicamento alemán —judiada— y el asesino genocida judío Benjamín Netanyahu pudo jactarse, acto seguido —judiada—, de haber vacunado antes que nadie a la mayoría de la población israelí. Parece que Bourla ni siquiera les hizo descuento a sus hermanos en la fe, porque según Lluís Amiguet, el astuto judío habría rechazado la contribución del gobierno estadounidense para poder así —judiada— fijar libremente los precios del invento alemán. «¡Y vaya si los fijó!» (Amiguet). Pero las facturas que pagan los gobiernos por sus contratos son confidenciales, de tal suerte que no se sabe a ciencia cierta qué ha pagado Israel por las vacunas de Bourla. No obstante, según ABC, a consecuencia de una oportuna filtración, se ha propalado entre la opinión pública la noticia (¿?) de que las vacunas de la UE saldrán cuatro veces más baratas que las de Israel:
A pesar de que tanto la compañía como los países no han querido nunca publicar el precio de mercado, que se negocia país a país, debido a un error, la ministra belga de Presupuestos, Eva de Bleecker, publicó a través de su cuenta de Twitter el precio de cada vacuna durante un debate en el Parlamento federal del país. Según el tuit después eliminado, la vacuna de Pfizer-BioNtech costaría a la UE 12 euros y 14,6 euros la de Moderna; mientras que la de AstraZeneca sería de 1,78 euros. Preguntada en reiteradas ocasiones al respecto, la ministra siempre ha rechazado admitir o desmentir la información debido al carácter «confidencial» de los contratos.
Ahora bien, para saber si algo es más barato necesitamos dos términos de comparación, no uno solo. ¿De dónde sale que son 12 euros para Europa y 39 euros para Israel? ¿Cómo sabemos, si los contratos son «confidenciales», qué ha pagado efectivamente Israel? ¿O es que se produjo aquí otra oportuna filtración? ¿Me permiten sugerir que todo esto apesta a judiada? Sudáfrica, en todo caso —judiada—, no puede costearse la vacuna Pfizer. El 94% de los ciudadanos de los países saqueados por Occidente permanecen sin vacunar, porque —judiada— las exigencias «irracionales» de la farmacéutica (Zweli Mkhize, ministro de sanidad de Sudáfrica) lo impiden. Por supuesto, es uno de esos crímenes de lesa humanidad que no importan, siendo así que sus víctimas, como los amalecitas, fueron de antemano condenadas por Yahvé —judiada— y nunca aparecen —judiada— tematizados en las películas de Hollywood, donde sólo la persecución de los «elegidos» —judiada— resulta relevante. La conclusión de Amiguet, que en primer lloc sembla molt amiguet dels jueus, es que no se debería nacionalizar Pfizer, sino sólo poner coto a su codicia. Nuestra opinión, por el contrario, es que la vacuna producida con dinero público tiene que ser gratuita en beneficio de toda la humanidad y para mayor gloria de Alemania. ¡¡¡Menuda oportunidad —¿judiada?— ha perdido la Merkel!!! Creemos también firmemente que si se reflotó a los judíos de Goldman Sachs —judiada— con impuestos desembolsados por personas que «no importan» como pago por las fechorías financieras del judío Lloyd Blankfein —banquero de Dios, del dios judío, por supuesto—, debería haber dinero para vacunar a todo el mundo aunque el judío Bourla vea recortados por ello algunos de sus beneficios. Lamentablemente, la gente (=gentiles) continuará pereciendo porque no dispone del pedazo de carne que les exige Bourla. ¿No huele, pues, toda esta matanza, a judiada?
EL JUDAÍSMO COMO IDEOLOGÍA RACISTA, SUPREMACISTA Y GENOCIDA (2). SUPREMACISMO
HEDOR
Más recientemente, «La Vanguardia» (21-4-2021) hizo público el contrato confidencial con Pfizer y nos enteramos de que la farmacéutica quedaba eximida de toda responsabilidad.
El contrato con Pfizer exime a Pfizer de responsabilidades.
Cómo debamos interpretar esta cláusula lo explica así «La Vanguardia»:
El documento suscrito detalla las posibles responsabilidades de la compañía en el caso de que el suero produjera algún daño a terceros, incluidas empresas. Y en el texto se deja claro que toda la responsabilidad queda en manos de la Comisión Europea y de los países miembros. La farmacéutica se responsabiliza de algún fallo que pudiera registrarse en la fabricación del suero, pero a partir de la entrega del mismo a los países miembros, la multinacional no se responsabiliza, ni afrontará ninguna indemnización. Ni ella, ni ninguno de sus directivos ni trabajadores ni tampoco los de cualquiera de sus socios. No se hace referencia en el texto a posibles indemnizaciones por efectos adversos no descritos en la ficha técnica del medicamento.
En todo caso, debemos estar muy tranquilos al respecto, porque Pfizer resulta que sólo ha sido sancionada en 18 ocasiones por diversos fraudes y delitos. Por ejemplo, Pfizer pagó en EEUU casi 24 millones de euros de multa por un caso de sobornos cuya finalidad era encarecer el medicamento suministrado a través de Medicare. Pfizer vela sólo por su negocio, aunque, justo es decirlo, también vela por… el beneficio, hasta el punto que encubrió, de forma alevosa, que uno de sus medicamentos parece prevenir el Alzheimer. Así las cosas, resulta también harto tranquilizador que el diario «Expansión» publicara un artículo el 23 de enero de 2021 según el cual, en las pesquisas realizadas por la Agencia Europea del Medicamento —EMA—, organismo que debe convalidar la eficacia de los productos farmacéuticos, los lotes de Pfizer mostraron muy distintos grados de efectividad:
La Agencia sufrió un ciberataque el pasado diciembre y los piratas informáticos accedieron a documentos confidenciales, que incluían correos internos de los empleados. El 13 de enero, los distribuyeron en el foro en inglés RaidForums y en el mercado ruso en la web oscura Rutor, aunque no sin antes haber «manipulado algunos» archivos y tratar de «socavar la confianza en las vacunas» entre los europeos, según defiende la EMA. / Los documentos se publicaron bajo el título «Evidencias de GRAN ESTAFA DE DATOS de las vacunas de Pfizer», que incluía etiquetas como «fraude» y «vacunas falsas». / (…) Los documentos muestran dos cuestiones: primero, que la EMA todavía tenía preguntas en esa etapa sobre la calidad de Pfizer, puesto que varias fábricas no habían sido inspeccionadas aún, algunos datos sobre la vacuna todavía no estaban a su disposición y la Agencia había observado diferencias de calidad entre diferentes lotes de la vacuna.
Fuente: https://www.expansion.com/sociedad/2021/01/23/600c1621468aeb8f678b4591.html
Este hackeo-difamación obligó a hacer público el contrato original de forma oficiosa, pero la cuestión de la calidad de los distintos lotes no ha sido desmentida. Así que podría darse el caso de vacunas muy eficientes para Israel, no tan eficientes para la malvada Alemania y de baja eficacia para la no menos malvada (como poco desde 1492 y con reincidencia por la Blaue Division) España. En este sentido, nos ha tranquilizado todavía más, si cabe, descubrir que, en realidad, Albert Boula no es un judío estadounidense, sino internacional, sefardí de la Diáspora (galut) cuya familia fue expulsada de España —y, más concretamente, de Gerona— en tiempos de los Reyes Católicos e inmigró luminosamente a los EEUU procedente de Grecia.
Figueres, la Marca Hispànica, 4 de diciembre de 2021
LA VACUNA DE TRUMP SERÍA UN MILAGRO DE ALÁhttps://carrer-la-marca.eu/el-judio-estadounidense-albert-bourla-se-apropio-de-la-vacuna-alemana/https://carrer-la-marca.eu/wp-content/uploads/2021/12/pfizer-edificio-2-1024x683.jpghttps://carrer-la-marca.eu/wp-content/uploads/2021/12/pfizer-edificio-2-150x150.jpgInternacionalUncategorizedcoronavirus,crímenes del liberalismo,judaísmo,neoliberalismo,oligarquía,sionismo,vacunaEL PUEBLO ALEMÁN INVIRTIÓ 350 MILLONES DE EUROS DE DINERO PÚBLICO EN LA INVESTIGACIÓN VACUNAL DE BIONTECH. Según 'La Vanguardia', 'Nacionalizar Pfizer' (Luís Amiguet), 1-12-2021, p. 3, Albert Bourla compró la patente de BioNTech y Pfizer se ha enriquecido con 80.000 millones de dólares. Por si fuera poco, Bourla...SETMANARI CARRER LA MARCASETMANARI CARRER LA MARCA talborcarrer.la.marca@intra-e.comAdministratorCARRER LA MARCA
Deja una respuesta