AUDIENCIA NACIONAL: «EL PARTIDO POPULAR ES UN AUTÉNTICO Y EFICAZ SISTEMA DE CORRUPCIÓN INSTITUCIONAL»
LA RECIENTE CONDENA POR LA ‘CAJA B’ DEL PP Y LA REFORMA DE LA SEDE DEL PARTIDO CON DINERO NEGRO CONFIRMA LA SENTENCIA DE 2008. En dicha sentencia, relativa a la Etapa I de la trama «Gürtel», la Audiencia Nacional describía al Partido Popular en los siguientes términos: «Entre el Grupo Correa y el PP se tejió una estructura de colaboración estable. Se creó un auténtico y eficaz sistema de corrupción institucional a través de mecanismos de manipulación de la contratación pública central, autonómica y local; a través de su estrecha y continua relación con influyentes militantes del partido, que tenían posibilidades de influir en los procedimientos de toma de decisión en la contratación pública de determinados entes y organismos públicos que dirigían o controlaban directamente o a través de terceras personas». La sentencia en cuestión, que condenaba ya al PP a título lucrativo como organización, fue confirmada por el Tribunal Supremo en octubre de 2020. Este Tribunal había empero reprochado a la Audiencia las excesivas referencias a la ‘caja B’ del PP en su resolución de 17 de mayo de 2018, pero si alguna duda podía quedar al respecto, se ha desvanecido tras la sentencia de la Audiencia Nacional, de 28 de octubre de 2021, en la que se dan por buenos los «papeles de Bárcenas» y por probada la existencia de dicha ‘caja B’, con la que el PP sufragó los gastos de reforma de su sede. Puede leer la nueva sentencia en este enlace.
EL PP ES UNA ORGANIZACIÓN CRIMINAL QUE CONVENDRÍA ILEGALIZAR
SÓLO LA TRAMA GÜRTEL HA GENERADO YA 69 CONDENADOS DEL PP
Por si fuera poco, decenas de causas que implican al partido desde sus bases mafiosas hasta la cúpula (M.Rajoy) siguen abiertas. Además, el caso Kitchen —donde el gobierno Rajoy utilizó a policías y fondos reservados para destruir pruebas de su corrupción— permite afirmar sin exagerar que el PP es una organización criminal. El PP como persona jurídica «ha sido condenado dos veces por beneficiarse de la red corrupta y se ha visto obligado a pagar 369.161,8 euros» de multas («El País», 1 de noviembre, p. 15), lo que cuestiona las afirmaciones de Pablo Casado según las cuales las corruptelas del PP serían «conductas personales» con las que «no tenemos nada que ver» (sic). La cínica desvergüenza del líder popular permite presumir que el PP sigue siendo en la actualidad una organización criminal; y que la única salida para este pseudo partido, máxime si recae en una —más que probable— tercera condena a título lucrativo, es su autodisolución voluntaria. Las condenas referenciadas también afectan a Ciudadanos y Vox, dos partidos de derechas que se presentaron como regeneradores de la vida política pero no han dejado de pactar con el PP para acceder a las bicocas institucionales.
CIUDADANOS SE AFERRA A UNA ORGANIZACIÓN CRIMINAL PARA SOBREVIVIR COMO PARTIDO
La condena del 28 de octubre considera probado que el PP pagó en negro las obras de su sede:
El pasado de corrupción del PP, condenado ya en 2018 por beneficiarse de la trama Gürtel, vuelve a estallarle al partido conservador, ahora encabezado por Pablo Casado. La Audiencia Nacional ha dictado este jueves una sentencia que impacta de lleno en el corazón de la formación, al considerar probado que pagó en negro la millonaria reforma de su sede central en la madrileña calle Génova, un edificio que la fuerza política aseguró este año que abandonaría, pero de la que aún no se ha marchado. El tribunal condena a dos años de cárcel al extesorero popular Luis Bárcenas —encarcelado actualmente por su implicación en la red de corrupción liderada por Francisco Correa— por abonar a la empresa Unifica más de un millón de euros “al margen de la facturación y la contabilidad oficial”. Unos fondos “no declarados a la Hacienda Pública”, según subrayan los jueces de la Sala de lo Penal, que también condenan al PP como responsable civil subsidiario.
Queda así mismo probada la veracidad de los «papeles de Bárcenas» y, por ende, la existencia de una ‘caja B’ del PP que tanto Mariano Rajoy como José María Aznar han negado:
Esta resolución inflige un duro golpe a los populares y echa por tierra la estrategia de defensa desplegada por el partido, que desde el estallido del caso ha tratado de desentenderse de todos los tejemanejes reflejados en los papeles de Bárcenas, publicados por EL PAÍS en 2013. Las antiguas cúpulas del PP, con Mariano Rajoy y José María Aznar a la cabeza, siempre han negado que existiera una caja b dentro de la formación y han atribuido a Bárcenas la responsabilidad de cualquier irregularidad. Pero los magistrados de la Audiencia Nacional arrancan su relato de “hechos probados” con una contundente afirmación: “En el periodo en que Bárcenas ocupó los cargos de gerente y tesorero, gestionó los fondos en metálico aportados a la formación política Partido Popular como donaciones privadas a través de una contabilidad paralela (contabilidad b) de cuyo ingreso y gasto no se dejó constancia en la contabilidad oficial ni por tanto fueron fiscalizadas por el Tribunal de Cuentas”.
La derecha española —incluida CiU y sus restos (PDxC, JxCat…)— es, en definitiva, un nido de corrupción, incompetencia y hedionda mentira —con toda la retahíla de delitos que estas pautas de conducta fraudulentas tienden a desencadenar—, cuyas consecuencias a efectos electorales han intentado paliar los políticos derechistas con el recurso a la demagogia, el radicalismo e incluso la xenofobia. No olvidemos que Vox es un pedazo del PP, escindido por la derecha, que pone de manifiesto su crisis de valores y el verdadero rostro de la vieja sigla franquista (Alianza Popular) fundada por Manuel Fraga. C’s ha resultado ser un intento fracasado —porque ya nació podrido del vientre de un oligarca catalán llamado Francesc de Carreras— de reconstruir el PP desde el centro. Las corruptelas de CiU han producido el falso nacionalismo y secesionismo del «procés»; las del PP, el falso españolismo y el «ayusismo», una imitación de Vox que amenaza con superar al original del ex pepero Santiago Abascal.
LA CORRUPCIÓN NO ES CUESTIÓN DE CASOS, SINO LA ESENCIA MISMA DEL SISTEMA POLÍTICO LIBERAL
Estamos ante frenéticas tentativas de encubrir la verdad, a saber, que la corrupción política no es cosa de casuística más o menos importante o generalizada, sino consustancial al sistema político liberal-capitalista. La podredumbre constituye la esencia de la pseudo política liberal, en realidad puro teatro, viciada desde la raíz por el dominio real y omnímodo de la oligarquía financiera transnacional. En la derecha esta obscenidad es más visible, más descarada quizá, pero evidencia de unas instituciones políticas convertidas en mercado afecta también a la falsa izquierda con que el sistema liberal-oligárquico intenta captar los votos de los trabajadores nacionales. No hay verdadera política en la escenificación liberal: manda siempre la oligarquía y el único programa que a la postre se hace efectivo, sea cual sea la sigla más votada en las elecciones, es el del «meta-partido» oligárquico. Todo se reduce, en definitiva, a ganar dinero y los políticos son harto conscientes de ello. De manera que aprovechan sus cargos públicos para enriquecerse como sea lo antes posible y retirarse con el riñón bien cubierto a la vida privada. El caso de la falsa izquierda o, si se quiere, de la derecha encubierta (PSOE, Podemos, ERC…), es empero más grave incluso que el de la derecha desvergonzada (PP, C’s, PDxCat, JxCat, Vox) —donde todo el mundo sabe a qué va cada cual—, porque usurpa el espacio electoral de una verdadera izquierda que defienda los intereses morales y materiales del pueblo trabajador (sustancia de la nación a la que, en teoría, los políticos democráticos deberían servir). Por cuanto, aunque los «políticos» liberales —sin excepción— sirven todos a la oligarquía financiera, la tarea de los «políticos» de «izquierdas», la derecha encubierta, ostenta siempre un «valor añadido» de ignominia, a saber: engañar miserablemente a la inmensa mayoría de la población presentándose como antagonistas del poder oligárquico. Para luego comprarse un casoplón.
Figueres, la Marca Hispánica, 3 de noviembre de 2021.
CARTA ABIERTA DE JAUME FARRERONS A SANTIAGO ABASCAL
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